Calzados Segarra, pisando fuerte en 7 países.
Calzados Segarra inició su camino en el mundo del calzado en la localidad de La Vall d’Uixó, Castellón, como un pequeño taller en el que se fabricaban alpargatas y calzado de esparto, un material típico de la zona muy utilizado por los artesanos de la localidad.
La empresa, que fue creada en 1882, y su fundador, Silvestre Segarra, no imaginaba el gran éxito que ésta iba a experimentar en los años venideros…
Siguiendo con la fabricación de calzado, en años posteriores, algunos maestros artesanos del calzado, que formaban parte del taller, con conocimientos en el tratamiento de la piel y el cuero, comenzaron a aplicar sus técnicas en calzado masculino de estilo militar.
Naciendo así algunos de los modelos más icónicos de Calzados Segarra, como las botas 3 Hebillas o la Paraka.
Con el paso de los años, la Fábrica Segarra se afianzó como una de las fábricas más importantes de calzado de toda España, abriendo grandes tiendas en múltiples ciudades españolas.
No solo vendían su ya famoso calzado militar, sino además, calzado para diario, tanto de hombre como de mujer, niños y niñas, y complementos como guantes o cinturones.
Calzados Segarra se había convertido en una de las marcas más reconocidas por toda la geografía española.