Yo conocí Calzados Segarra desde mi niñez. Nací en 1958 en Barcelona y los orígenes de mi familia son de la zona de Vinaroz.
Me apellido Segarra y mi padre nos compraba el calzado en una tienda Segarra, cerca de casa en la calle Sants de Barcelona.
Siempre me fascinó el diseño de la bota tres hebillas de los soldados. Aún hoy tengo unas de los años 80 en perfecto estado de conservación. Como nuevas. Ni siquiera tienen las típicas roturas de uso en los tacos de las suelas, el único defecto de diseño que tenían estás botas y que creo hoy dia solucionado.
En mi juventud fui montañero y escalador y utilizé unas botas Segarra de montaña que tenían una hebilla en el empeine y que jamás volví a ver en ningún sitio.